Flamenco Party, Carlos Montoya
Carlos Montoya nació en Madrid el 13 de diciembre de 1903
En el año 1917 Montoya empezó a tocar la guitarra como un músico profesional. En el año 1966 él produjo su álbum más notable “Suite Flamenco,” el cual es un concierto que el grabó con la “St. Louis Symphony Orchestra.”
La vida de Carlos Montoya se puede describir como un efecto del mundo del arte. El vivió en una cultura bohemia desde su nacimiento hasta la muerte. Su presencia, una combinación de creatividad pura, e intuición artística, dejó una marca en el campo de música (especialmente el estilo de flamenco) para siempre.
Los padres de Carlos Montoya eran gitanos que le inspiraron a seguir la misma senda que ellos habían escogido. Su padre que se llamaba Juan García era un vendedor que le vendió los burros al ejército de España. El se murió cuando Carlos tenía dos anos. Así su madre, una mujer que se llamaba Emilia Montoya acepto la responsabilidad de criar a su hijo. Ella era una guitarrista amateur que empezó a enseñarle a Carlos como tocar la guitarra cuando el tenía ocho anos. Ella se dió cuenta que su hijo tenía un talento enorme, y decidió pedirle al hombre Pepe el Barbero que le enseñara a Carlos. Pepe el Barbero le dio a Carlos algunas lecciones hasta que él se dio cuenta que su estudiante le había superado sus habilidades, y no podía continuar las lecciones.
El talento de la familia Montoya era prominente en todos los miembros. El tío de Carlos era tan famoso en España cuando Carlos Montoya era joven. Así Emilia Montoya (su apodo de teatro era “La Tula”) le pidió a su hermano que le enseñara a Carlos también.
Aunque él era el tío de Carlos no podía ayudar la familia de su hermanita, porque Ramón estaba demasiado concentrado en la educación musical de su propio hijo. Esta situación era una lástima, sin embargo Carlos recibió todo el entrenamiento que necesitaba por irse con su tío y madre en las giras musicales donde les conoció a los mejores guitarristas y cantantes en el campo de Flamenco de su época.
Cuando Carlos Montoya tenía catorce anos, empezó a tocar el flamenco profesionalmente para los cantantes y bailarines en los cafés de Madrid. Lo prodigioso sobre esta hazaña era que él nunca había aprendido ni cómo leer las hojas de música, ni tener una educación formal de música.