Gocen Mi Tumbao, Mario Hernández
Mario Hernández, Mario Casanova Clemente nació el 21 de junio de 1924, en la Calle Cambray en Sabana Llana, Río Piedras, Puerto Rico. Fueron sus padres, el señor Casildo Casanova y la señora Sandalia Clemente. Comenzó en la música a la edad de 14 años, aprendiendo por sí solo a tocar la guitarra y el tres.
Mario Hernández es compositor y arreglista. Fue fundador y director del conjunto musical “Los Diablos del Caribe”, alcanzando la fama en Puerto Rico, Estados Unidos de América y en países de América Latina, destacándose en la República Dominicana, Venezuela, Colombia, México y Panamá (donde le rindieron un homenaje).
Cuando partió de Puerto Rico, allende los mares, se estableció en la ciudad de Nueva York, en donde le cambió el nombre a su conjunto musical y le llamó “Sexteto Borinquen”. En el famoso centro de baile neuyorquino el “Palladium”, alternó con las orquestas de Tito Puente, Tito Rodríguez y Machito, entre otros, brindándole a la diáspora puertorriqueña su son borinqueño.
Mario Hernández fue en el “Palladium” que el maestro Tito Puente le bautizó como el “Rey del Tres” al verlo tocando el instrumento, soneando y cantando la segunda voz de manera cadenciosa. Le dijo que nadie en el mundo podía hacer tal ejecución. Por esa razón, el “Sonero Mayor” Ismael Rivera lo contrató para grabar un número musical con su grupo “Los Cachimbos”, y quedó tan complacido que lo contrató 27 veces más.
Con ellos, la interpretación de Mario Hernández y sus tres en la obra de Tite Curet Alonso, “Las Caras Lindas”, marcó un hito histórico en la remembranza musical de todas las épocas. Don Mario también grabó con Pedro Ortiz Dávila, mejor conocido como “Dávilita”, cantante del cuarteto Victoria del compositor puertorriqueño don Rafael Hernández, y con Johnny Albino, la primera voz del renombrado Trío Los Panchos.
Mario Hernández es un excelente compositor y tiene a su haber más de 500 composiciones de las cuales ha grabado más de 200 de ellas. Su primera composición la tituló “Mi único amor”, la cual compuso a los catorce años de edad, y fue dedicada a su madre doña Sandalia Clemente. El disco de larga duración “Para bailar y gozar”, ha sido su mayor éxito, ya que sus nueve canciones fueron y siguen siendo las preferidas del público de la tercera edad.